Hijo del «Cacique de la junta», Martín Elías lanzó su primera producción musical en solitario, respaldado en el acordeón por otra dinastía musical, que ya consolidó su nombre en el mundo artístico: Rolando Ochoa, hijo del corralero Calixto Ochoa.
Martín Elías Díaz nació el 18 de junio de 1990 en Valledupar. Además de cursar sus estudios normales y jugar al fútbol, uno de sus hobbies favorito, por influencia de familia y por talento propio desde temprana edad se inició en el ambiente musical.
Su tío Élber Díaz coordinaba las actividades musicales del grupo vallenato La Familia de Diomedes y a éste se integró Martín, junto con sus hermanos Diomedes Dionisio y Rafael, entre otros. Así logró grabar sus primeros trabajos, entre el 2001 y el 2004. Fueron cinco temas musicales de los cuales recuerda Muchacha bonita, Amor desconsolado y Otro adiós es morir.
En ese 2004 se retiró de la Familia de Diomedes para iniciar una carrera musical como solista para lo cual buscó la compañía del acordeonero Fernando Rangel. Su primera prueba de fuego la vivió en el Festival de la Leyenda Vallenata versión 38, cuando participó en la categoría juvenil, y logró la primera posición. Con Fernando Rangel estuvo en distintas presentaciones en Bogotá, Santa Marta y Barranquilla.
Luego se puso en contacto con Rolando Ochoa: “le pedí el favor que me hiciera producción. Al ver que todo el CD quedó bonito Rolando me propuso que nos uniéramos”. El resultado fue una producción musical completa en el 2007 que presentó este nuevo dúo con el título de Martín Elías y Rolando Ochoa, una nueva historia, además de una veintena de conciertos en los que se ha aplaudido esta afortunada unión.
Martín Elías también se estrenó como compositor en este trabajo musical con No pienses lo malo.